Consejos sobre cómo quitar el hielo de los cristales o calentar la batería
Los vehículos también sufren el frío. Cuando las temperaturas bajan puede que la mecánica de nuestro coche se resienta más de lo habitual. Por eso, queremos darte algunos consejos que te serán muy útiles para arrancar tu coche si está congelado, y conseguir que se ponga en marcha lo antes posible.
¿Cómo quitar el hielo del parabrisas del coche sin romper el cristal?
Uno de los primeros problemas con que te puedes encontrar al ir a coger tu coche en plena ola de frío, es que el parabrisas esté cubierto por una capa de hielo. La opción del agua caliente no sirve, puesto que puede hacer que el cristal se quiebre por el cambio brusco de temperatura. Ante todo, si hay acumulada nieve tendrás que retirarla primero con un cepillo; y a continuación, puedes hacer varias cosas para eliminar el hielo:
- Arrancar el motor y poner la calefacción a una temperatura suave (no la pongas muy alta o pasará lo mismo que con el agua caliente)
- Rociar el cristal con alcohol sanitario, ya que deshace el hielo (si no tienes, puedes usar también un líquido limpiador de congeladores)
- Usar una rasqueta de plástico para retirar el hielo poco a poco (cuesta… pero es barato)
Existen además varios trucos para evitar que se acumule hielo en el parabrisas. Uno de ellos es colocar el típico parasol que se usa en verano pero por fuera, sujeto con los limpiaparabrisas, o en su defecto colocar un cartón. Si no usas este truco, no es mala idea dejar los limpiaparabrisas levantados si sabes que va a helar, porque si se quedan pegados al cristal pueden romperse al accionarlos. Por último, en zonas de clima frío es recomendable usar un líquido limpiaparabrisas con anticongelante para evitar complicaciones.
Calienta la batería
Uno de los elementos del vehículo que más sufre con el frío, y que más complicaciones te puede dar es la batería. Es muy recomendable mantenerla en buen estado de cara al invierno, y procurar cambiarla si vemos que empieza a fallar. Un buen truco si la batería te da problemas para arrancar con el frío, es cubrirla con un trapo seco caliente, calentado con la plancha por ejemplo; es importante no mojar nunca la batería…y por supuesto, no emplees fuego para calentarla.
Acciona el contacto varias veces
Si tu vehículo utiliza como combustible gasolina y tienes en buen estado las bujías, normalmente vas a poder arrancar el motor al instante incluso con frío intenso. Pero si usas diésel, ten en cuenta que este combustible es más sensible al frío, y también lo son los calentadores que deben iniciar la combustión del diésel, que deben calentarse lo suficiente; por tanto, bajo un frío intenso un buen truco es accionar el contacto varias veces (sin llegar a arrancar) para lograr que alcancen la temperatura adecuada, antes de arrancar el motor.
Deja el coche calentar al ralentí
Cuando dejas tu coche en el exterior y/o hace demasiado frío, puede que después de conseguir arrancarlo pienses que ya lo has hecho todo: pues no te confíes. Bajo esas condiciones, es más que recomendable dejar el motor arrancado y mantenerlo al ralentí al menos un par de minutos, hasta que el motor coja temperatura y el aceite lubrique los componentes principales. Una vez en marcha, usa el acelerador gradualmente, suave al principio y aumentando la intensidad a medida que el motor vaya calentando.
Si usas diésel…
Hay otra cosa que debes tener en cuenta si usas diésel en tu vehículo; y es que el diésel a partir de los -10 ºC puede comenzar a congelarse (concretamente, a “gelificarse”), por lo que si se aproxima una ola de frío o las temperaturas en tu zona van a bajar demasiado, deberás añadirle anticongelante. En el caso de los coches que usan gasolina, no hay por qué preocuparse, ya que su punto de congelación es de -107 ºC.
No descuides la refrigeración
Normalmente, el líquido refrigerante que usa el coche incluye un porcentaje de anticongelante (generalmente etilenglicol) para evitar que se congele a bajas temperaturas; es importante conocer el punto de congelación del líquido refrigerante de tu coche, para elegir el adecuado teniendo en cuenta las temperaturas que pueden alcanzarse en tu zona. Ante la duda, un líquido refrigerante con un punto de congelación a -12 ºC suele ser suficiente para la mayoría de casos
Protege tu vehículo del frío
Antes mencionamos la importancia de dejar que el motor de tu coche, antes de enfrentarse al frío del exterior, caliente unos minutos al ralentí, acelerándolo luego poco a poco. Pero eso no basta. En condiciones de bajas temperaturas, es importante que tomes las precauciones posibles para exponer tu coche lo mínimo posible al frío, por ejemplo aparcando en zonas orientadas al sur o a la salida del sol, y a ser posible dejándolo aparcado en un sitio cubierto para protegerlo de la escarcha. Si hace viento, apárcalo en una zona protegida, por ejemplo junto a un muro.
Utiliza un buen aceite
El aceite es la sangre del coche, es lo que lubrica y nutre su corazón, que es el motor: por eso, te recomendamos que no escatimes a la hora de ponerle un buen aceite a tu coche, ya que con el tiempo la mecánica y tu bolsillo (menos averías…) te lo agradecerán. Ante el frío intenso es conveniente usar un aceite multigrado, que se adapta a la temperatura exterior para mejorar el arranque.
Esperamos que estos consejos para cuidar tu coche en época de frío te hayan sido de mucha utilidad. ¡Romu siempre a tu lado, siempre en movimiento!